«La proactividad de Laber y su eficiencia
nos permite ser resolutivos con nuestros clientes»
Tratamientos Ecológicos del Noroeste (TEN) inició su actividad en 2004 centrándose en dar una nueva salida a los residuos no peligrosos. Desde su inicio, TEN ha estado involucrado en mejorar el medio ambiente, desarrollando técnicas de reaprovechamiento de suelos.
Más de 16 años realizando tratamiento de residuos obteniendo por un lado enmiendas orgánicas empleadas como fertilizantes de tierras agrícolas y forestales. Y, por otro lado, tecnolosoles, los nuevos suelos con los que se está restaurando la Mina Touro.
Un trabajo de recuperación que ha sido reconocido y premiado que necesita ser analizado constantemente para certificar que se cumple con los requisitos exigidos, algo que corporación Laber hace desde hace diez años.
El laboratorio, con sede en Santiago de Compostela, es el responsable de analizarlos lodos de entrada a las instalaciones para ver si los pueden admitir (por contaminación de metales, por ejemplo) y el tecno suelo elaborado. Asimismo, Laber controla la autorización ambiental integrada en lo relativo a calidad del agua vertida.
Un trabajo de revalorización por el que TEN ha merecido el premio «Medio Ambiente » de la asociación Profesional de Empresas Medioambientales de Galicia (Aproema). Hoy hablamos con el director de la empresa ubicada en Touro, David González.
TEN es un referente en recuperación de residuos, ¿Qué parte es la más compleja para llevar esta labor?
Sin duda la parte más compleja es la fidelización de los clientes ya que eso abarca toda la cadena de valor de Ten, desde la comercial hasta la de producción y logística.
Sus labores tiene un importante impacto medioambiental y en la naturaleza, ¿Qué es lo que más destaca de ambos puntos?
Somos un claro ejemplo de modelo de empresa basada en la sostenibilidad, ya que prestando un servicio a la sociedad como es la gestión de sus residuos, estos se transforman en materias primas aptas para fabricar productos.
En una empresa con las características de TEN, ¿Cuáles son los procesos a seguir para cumplir con los requisitos de calidad y responsabilidad?
Unos de los aspectos básicos del proceso es el control y la trazabilidad. En este sentido contamos con un partner de referencia como es Laber que nos garantiza que los controles tanto de entradas como de productos terminados se realizan de manera independiente y rigurosa.
¿Cuáles son los principales puntos por los que Laber es la empresa que firma sus certificados desde hace una década?
Básicamente destacaría su capacidad de prestar servicio en todo momento. No es un cumplido, es que Laber y su equipo siempre están proactivos para solucionar cualquier problema que necesitemos. Eso es un valor que en TEN destacamos ya que nosotros también nos debemos a nuestros clientes.
Una de sus labores más destacadas y reconocidas es la valorización de la Mina Touro. ¿Cómo se encuentra este proceso?
Lo logrado en Touro es realmente espectacular, en los 15 años de vida de TEN hemos logrado controlar la acidez de las aguas, lo que ha provocado una indudable mejora de todos los ríos del entorno, tanto físico-química como biológica. Y recordemos que toda esta cuenca acaba en el río Ulla.
¿Cómo han evolucionado los certificados, (demandas y necesidades) desde hace una década?
– La actual situación de crisis sanitaria ha afectado al tratamiento de residuos, con controles más rígidos, y nuevos baremos a tener en cuenta. Una evolución natural con el paso del tiempo.
En este mismo ámbito, la crisis de la Covid19, ¿ha provocado cambios?
Realmente poco ha variado nuestro trabajo, pues el nivel de controles ya era máximo en la época Pre-pandemia.
¿Para 2021 TEN se ha marcado nuevos objetivos?
2021 esperamos que sea un año de transición a la espera de la posible reapertura de la Mina y de consolidación de los resultados de 2020.